Los trastornos alimenticios son mucho más comunes de lo que uno piensa. Sus signos, según el tipo de trastorno, pueden ser extremadamente evidentes o increíblemente discretos, pero sus consecuencias son similares en lo perjudiciales que pueden ser para la salud mental y física de una persona.
Hay muchas razones por las que las personas sufren de trastornos alimenticios y las estadísticas[1] muestran que “70 millones de personas en todo el mundo viven con trastornos alimentarios” y ese número sigue aumentando.
Esto hace que los trastornos alimentarios sean un problema grave que necesita intervención médica y psicológica para ser tratado.
Estos trastornos también pueden ser indicadores de otras condiciones de salud que no han sido diagnosticadas o que no han recibido suficiente atención por parte del paciente o de sus proveedores de salud. Algunas de las razones por las que las personas desarrollan trastornos alimenticios o son propensas a ellos incluyen diferencias en la estructura y biología del cerebro[2], así como ciertos rasgos de personalidad como el perfeccionismo y la impulsividad[3].
Uno de los hallazgos más recientes ha sido el vínculo entre el TDAH y la alimentación impulsiva.
Así como el impacto que puede tener en las personas que han sido diagnosticadas con cualquiera de las dos afecciones. El TDAH se puede tratar con terapia y medicamentos, pero a menudo no se diagnostica aunque los síntomas se notan durante la infancia de una persona. Si bien la alimentación impulsiva se ha convertido en un rasgo del trastorno por atracón (BED), no fue hasta hace poco que se identificó como un síntoma o comportamiento de las personas con TDAH.
Las personas que comen impulsivamente o se dan atracones regularmente tienen más probabilidades de tener sobrepeso y obesidad[4] y nuestro equipo multidisciplinario de médicos en LIMARP® está bien equipado para ayudar a los pacientes a controlar su dieta si se les ha diagnosticado TDAH. Entendemos que cada caso, junto con el diagnóstico, es diferente, y nuestros planes de tratamiento integral están diseñados de acuerdo a las necesidades y condiciones de cada paciente. Te recomendamos encarecidamente que hables con un profesional de la salud mental si tú o alguien que conoces presenta síntomas de TDAH o alimentación impulsiva para evitar el autodiagnóstico y obtener el tratamiento necesario para mejorar tu salud o la de ellos.
Este artículo se centrará en el vínculo que se ha encontrado recientemente entre un diagnóstico de TDAH y la alimentación impulsiva.
Ten en cuenta que la investigación realizada sobre este tema específico aún es bastante reciente y que es importante comunicarse con tu médico para obtener más información sobre cualquiera de las dos afecciones.
Para empezar, nos gustaría hablar más sobre el trastorno por déficit de atención/hiperactividad o TDAH, que es una condición que afecta el comportamiento de las personas[5], haciéndolas parecer inquietas. Las personas, tanto niños como adultos, con TDAH pueden tener problemas para concentrarse y pueden actuar por impulso.
Este trastorno, según la CDC, es una de las condiciones de salud mental más comunes entre las personas en los Estados Unidos y su tasa ha aumentado en los últimos 20 años debido a una mayor conciencia, disminución del estigma y mejor acceso a la atención médica[6].
Aun así, es común que los niños con TDAH no sean diagnosticados y, una vez que llegan a la edad adulta, es posible que algunos de los síntomas que presenten no se relacionen fácilmente con esta afección. Es por eso que recomendamos que si tienes problemas con los atracones o la alimentación impulsiva, te comuniques con un profesional de la salud mental para que realice una prueba de detección del TDAH. La impulsividad puede ser un rasgo de los trastornos alimentarios, especialmente el trastorno por atracón y bulimia nerviosa, y se han realizado estudios que concluyeron que es más probable que los niños con TDAH desarrollen un trastorno alimenticio que aquellos que no lo tienen.
Uno de esos estudios[7] encontró que “algunos adultos y niños con TDAH presentan comportamientos desregulados e impulsivos del trastorno alimenticio y existe una asociación creciente entre el TDAH, la obesidad y los atracones”. Esto puede deberse a varios factores que a menudo vienen con un diagnóstico de TDAH, como ansiedad, problemas para concentrarse y planificar, aburrimiento, estrés y deficiencias de neurotransmisores.
Estos síntomas pueden empujar a las personas con TDAH a patrones alimenticios impulsivos o a buscar consuelo en alimentos procesados y ricos en calorías o, cuyos niveles de azúcar pueden darles el pico de dopamina que su cerebro no suele producir. Comer también puede convertirse en una muleta para lidiar con la ansiedad o el aburrimiento, y cuando estos factores no se regulan, tampoco su dieta. La alimentación impulsiva también es una de las razones por las que las personas “que fueron diagnosticadas con TDAH cuando eran niños tenían el doble de probabilidades de tener sobrepeso en un estudio de seguimiento de 33 años en comparación con aquellas a las que no se les diagnosticó la afección”.[8]
La alimentación impulsiva se puede regular una vez que el paciente inicia su tratamiento para el TDAH, pero también es importante enseñarle desde una temprana edad hábitos de alimentación saludables para evitar problemas de salud en el futuro.
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Referencias
- [1] “Eating disorder statistics 2022”. https://www.singlecare.com/blog/news/eating-disorder-statistics/. (Accessed August 20, 2022).
- [2] Riva G (2016) Neurobiology of Anorexia Nervosa: Serotonin Dysfunctions Link Self-Starvation with Body Image Disturbances through an Impaired Body Memory. Front. Hum. Neurosci. 10:600. doi: 10.3389/fnhum.2016.00600
- [3] Culbert KM, Racine SE, Klump KL. Research Review: What we have learned about the causes of eating disorders – a synthesis of sociocultural, psychological, and biological research. J Child Psychol Psychiatry. 2015 Nov;56(11):1141-64. doi: 10.1111/jcpp.12441. Epub 2015 Jun 19. PMID: 26095891.
- [4] Marzilli E, Cerniglia L, Cimino S. A narrative review of binge eating disorder in adolescence: prevalence, impact, and psychological treatment strategies. Adolesc Health Med Ther. 2018 Jan 5;9:17-30. doi: 10.2147/AHMT.S148050. PMID: 29379325; PMCID: PMC5759856.
- [5] “Attention deficit hyperactivity disorder (ADHD)”. https://www.nhs.uk/conditions/attention-deficit-hyperactivity-disorder-adhd. (Accessed August 25, 2022).
- [6] “ADHD Throughout the Years”. https://www.cdc.gov/ncbddd/adhd/timeline.html. (Accessed August 25, 2022).
- [7] Reinblatt SP. Are Eating Disorders Related to Attention Deficit/Hyperactivity Disorder? Curr Treat Options Psychiatry. 2015 Dec;2(4):402-412. doi: 10.1007/s40501-015-0060-7. Epub 2015 Oct 9. PMID: 26949595; PMCID: PMC4777329.
- [8] Cortese S, Ramos Olazagasti MA, Klein RG, Castellanos FX, Proal E, Mannuzza S. Obesity in men with childhood ADHD: a 33-year controlled, prospective, follow-up study. Pediatrics. 2013 Jun;131(6):e1731-8. doi: 10.1542/peds.2012-0540. Epub 2013 May 20. PMID: 23690516; PMCID: PMC4074659.