El Método del Plato Bariátrico

El creciente problema de la obesidad generalizada y las intervenciones bariátricas dirigidas a mitigar su impacto en la salud han […]

The Bariatric Plate Method

El creciente problema de la obesidad generalizada y las intervenciones bariátricas dirigidas a mitigar su impacto en la salud han introducido un enfoque fresco para manejar el peso y el bienestar nutricional de las personas que se han sometido a procedimientos bariátricos.

Los métodos bariátricos han demostrado ser efectivos para abordar la obesidad severa (grados II y III), lo que ha resultado en un aumento significativo en el número global de cirugías bariátricas realizadas [1]. Aunque la cirugía en sí contribuye a la pérdida de peso deseada, el énfasis sigue siendo la reeducación alimentaria y la actividad física.

A pesar de que la Pirámide Alimentaria se usa comúnmente como guía dietética, no ofrece un plan preciso para componer las comidas diarias para pacientes bariátricos [1].

En cuanto al enfoque estándar para manejar la obesidad, los métodos nutricionales establecidos para pacientes post-cirugía bariátrica abarcan dos aspectos clave: (1) lograr un déficit calórico durante la etapa de pérdida de peso y (2) asegurar una ingesta adecuada de proteínas.

Se han emitido varias recomendaciones nutricionales para pacientes post-bariátricos, que se concentran principalmente en consejos dietéticos a corto plazo. Es crucial subrayar que las modificaciones duraderas en los hábitos alimenticios y la actividad física son esenciales para lograr una pérdida de peso efectiva a largo plazo y evitar posibles complicaciones más adelante [2].

En este texto exploraremos el Método del Plato Bariátrico, un enfoque sencillo diseñado para ilustrar a los pacientes que han pasado por cirugía bariátrica cómo pueden distribuir macronutrientes y micronutrientes en sus comidas diarias.

Esto ayuda a respaldar sus objetivos de pérdida de peso a largo plazo y asegura la preservación de su bienestar nutricional [1].

  • Restricción Calórica: La clave para lograr una pérdida de peso exitosa después de la cirugía gira en gran medida en torno a una restricción calórica efectiva. Sin embargo, se ha realizado investigación y no hay un objetivo estándar de calorías que un paciente post-bariátrico necesite alcanzar o seguir como regla; cada persona es diferente y debería tener un método de alimentación personal que se adapte mejor a sus necesidades. Los comportamientos alimentarios maladaptativos se han identificado como un factor principal detrás del consumo excesivo de calorías e insuficiente pérdida de peso después de la cirugía bariátrica [1]. En la práctica clínica, los nutricionistas deberían colaborar con los pacientes para calcular la ingesta calórica diaria apropiada, considerando factores como (1) la actividad física (que aumenta la tasa metabólica general, lo que significa más calorías quemadas) y (2) la ingesta de proteínas (para optimizar el uso de este nutriente y evitar que sea únicamente una fuente de energía) [2]. El método del plato bariátrico sugiere que la ingesta calórica diaria comience alrededor de 500 kcal con nutrición líquida y aumente gradualmente a una forma sólida, alcanzando hasta 1,200 kcal al día. Las pautas nutricionales para pacientes post-cirugía bariátrica se detallan en recomendaciones que destacan la importancia de las proteínas, recomendadas en un rango de 1-1.5 gramos por kilogramo de peso ideal (aproximadamente 60-80 gramos al día, representando el 25% de la ingesta total), junto con los carbohidratos en un 45% y las grasas en un 30% [1].
  • Proteínas: El método del plato bariátrico destaca las proteínas como un nutriente crucial a monitorear después de la cirugía bariátrica (2). Puedes encontrar proteínas en una amplia variedad de fuentes animales y vegetales. Las fuentes completas incluyen carne, huevos, leche y pescado. Las legumbres como frijoles, lentejas, soja y garbanzos se destacan entre las fuentes vegetales por su contenido de proteínas. Aunque la mayoría de los aminoácidos esenciales están presentes en varios alimentos, condiciones específicas como la cirugía bariátrica pueden necesitar suplementos. Se recomienda el uso de proteínas de suero para cumplir con los requisitos nutricionales diarios después de la cirugía y se debe continuar a largo plazo. Una guía recomendable es que aproximadamente la mitad (50%) del plato consista en fuentes de proteínas para mantener una dieta equilibrada [1].
  • Vitaminas y Minerales: En el método del plato bariátrico, aproximadamente el 30% del plato debe contener una mezcla de vitaminas, minerales y fibras comúnmente presentes en frutas y verduras. Estos alimentos, que necesitan ser masticados debido a su textura fibrosa, deben variar diariamente. Esta diversidad ayuda al sistema inmunológico, apoya la renovación de la piel y ayuda a regular el metabolismo. Una táctica útil para asegurar una amplia ingesta de nutrientes durante las comidas implica organizar estos nutrientes por sus colores. Las frutas y verduras amarillas y rojas, que son altas en vitamina A (una vitamina liposoluble), son vitales para mantener un cabello, piel y uñas saludables. Zanahorias, remolachas, calabaza e hígado de vaca son ejemplos de estas fuentes. Las verduras verdes, como las hojas verdes de repollo, mostaza, acelga, lechuga y rúcula, son ricas en vitaminas del complejo B y contribuyen a prevenir la anemia. Las frutas cítricas sirven como una fuente importante de vitamina C, que ayuda en la absorción de hierro y aumenta la inmunidad. Naranjas, limones, maracuyá, acerola, manzanas verdes, tomates y uvas son algunas de estas fuentes. Las verduras blancas como cebollas, ajo, champiñones, coliflor, palmitos y quimbombó son particularmente efectivas para prevenir enfermedades cardiovasculares y cáncer [1].
  • Carbohidratos: El resto del plato debe consistir en carbohidratos, esenciales para suministrar la energía necesaria para las actividades diarias. Elegir opciones integrales como panes integrales, arroz, pasta y cereales dentro de este grupo puede reducir la ingesta de azúcares y grasas en pacientes bariátricos. Esto promueve la salud del corazón y contribuye a una mayor sensación de saciedad, lo que ayuda a gestionar mejor el apetito [1]. En alrededor del 25 al 50% de los pacientes, después de una cirugía bariátrica, puede haber alteraciones en las funciones motoras del estómago, afortunadamente solo el 5 al 10% desarrolla síntomas, esto se llama síndrome de Dumping y se manifiesta como sensibilidad al azúcar. Estos síntomas se pueden manejar mediante modificaciones dietéticas, como evitar la ingesta de azúcar simple (por ejemplo, dulces, refrescos, galletas) y reemplazarlos por carbohidratos complejos (pasta, frutas, verduras, etc.)

Resumen

La información disponible indica que los pacientes sometidos a cirugía bariátrica necesitan un método integral para navegar por los cambios requeridos después de la operación. La orientación dietética personalizada es crucial tanto antes como después de la cirugía, acompañada de un apoyo continuo para establecer hábitos alimenticios más saludables a largo plazo. El método del plato bariátrico también respalda la idea de un equipo interdisciplinario, que desempeña un papel fundamental para garantizar que los pacientes comprendan el proceso quirúrgico, la necesidad de alterar los hábitos alimenticios y las elecciones de alimentos, y para brindar un sólido apoyo social [2].

El método del plato, una técnica instructiva para planificar comidas, posee múltiples cualidades que lo hacen atractivo para su uso entre adultos. Enseñar nutrición mediante estructuras de comidas simples y saludables que enfaticen la calidad dietética general y ofrezcan una idea clara de las porciones de alimentos ideales en el plato resulta en un enfoque constructivo y unificado para impartir consejos dietéticos prácticos [3].

En general, un paciente post-cirugía bariátrica debe entender que sus viejos hábitos alimentarios necesitan cambiar porque ahora su estómago tiene una estructura diferente y, por lo tanto, funciona de manera diferente (principalmente debido a alteraciones en la absorción de nutrientes).

El método del plato bariátrico es una forma simple pero efectiva de abordar los cambios en las necesidades nutricionales en comparación con lo que parece el plato de una persona normal.

Junto con esto, la ingesta de agua, el uso de suplementos y la actividad física deben incorporarse en la rutina diaria de un paciente post-cirugía bariátrica [1].

Contáctenos hoy

Nuestro equipo está listo para ayudarte. En LIMARP, los pacientes siempre recibirán respuestas cálidas, sinceras y profesionales. Para una evaluación gratuita, llámanos al (619) 270 8823, completa un formulario de contacto en nuestro sitio web o envíanos un mensaje a través de cualquiera de nuestras redes sociales.

Referencias

  • Maria Paula Carlini Cambi. Giorgio Alfredo Pedroso Baretta. Bariatric diet guide: plate model template for bariatric surgery patients. ABCD Arq Bras Cir Dig. 2018;31 (2):e1375
  • Violeta L. Moize. Xavier Pi-Sunyer. Heidi Mochari. Josep Vidal. Nutritional Pyramid for post-gastric bypass patients. OBES SURG (2010) 20:1133-1141
  • Katheryn M. Camelon RD. Karin Hadell. Paivi T. Jansen, MSc. Kaisa J. Ketonen, Msc, Heli M. Kohtamaki, Msc. Sari Makmatilla, MD, Msc. Marja-Leena Tormala, Msc. Raisa H. Valve, Msc. J Am Diet Assoc. 1998; 98:1155-1158