Después de una cirugía bariátrica el paciente se siente muy diferente. Primero que nada deja de tener el apetito de antes y la sensación de saciedad llega después de haber comido o bebido muy poco alimento. Los días de comer sin límite desaparecen, pues resulta imposible hacerlo; y aun cuando lo llegaran a intentar, el malestar es tal que difícilmente se sienten motivados a volver a comer de más.
El peso empieza a desaparecer muy rápido, la forma del cuerpo y de la cara cambia semana tras semana y la sensación de alivio y logro se establece cada vez más en la vida del paciente. Si siguió su plan pre-quirúrgico como debe ser, el paciente ya está hecho a la idea de que sus porciones se reducirán drásticamente y de que el ejercicio tomará gran relevancia en su vida. Sin embargo, el ejercicio puede llegar a ser la parte del programa que menos cumpla.
Es muy probable que en el pasado, el paciente haya intentado todo tipo de dietas y ejercicios para bajar de peso sin gran resultado y cuando empieza a experimentar una pérdida de peso rápida puede llegar a sentir que el ejercicio no es tan indispensable; falta un día, luego dos y cuando menos se da cuenta lo ha dejado casi por completo.
No todos los pacientes bariátricos dejan el ejercicio, pero los que lo hacen se dan cuenta más pronto que tarde que el cuerpo humano necesita de la actividad física para funcionar de la mejor manera. Además diversos estudios han comprobado que quienes se someten a cirugía para la obesidad bajan más de peso y tienen mejores posibilidades de mantener su peso ideal si practican ejercicio de forma regular.
Un estudio que evaluó a 200 pacientes bariátricos encontró que además del cambio de hábitos alimenticios, la actividad física regular es el factor que mejor pronostica si un paciente será exitoso en bajar de peso. Lo que significa que además de apegarse a un plan de alimentación, lo mejor que se puede hacer para bajar de peso y mantenerse es el ejercicio.
La actividad física regular tonifica los músculos, beneficia al sistema cardiovascular, mejora el ánimo al producir endorfinas y genera una sensación de haber logrado algo importante. Si el ejercicio se realiza en grupo se suman otros beneficios, pues se crea un sistema de apoyo que favorece la constancia y el cumplimiento.
Cuando un paciente llega a LIMARP lo primero que se hace es realizarle una valoración completa, una vez que se diseña su tratamiento lo que sigue es iniciar la fase pre-operatoria. Las indicaciones específicas varían de caso en caso, pero todos los planes incluyen algún tipo de actividad física, la intensidad va a depender del estado del paciente, pero la importancia del ejercicio se enfatiza desde esos primeros momentos.
Un programa permanente de actividad física es indispensable para el éxito a largo plazo del paciente bariátrico, porque aunque al principio llegue a bajar de peso sin hacer ejercicio, en unos cuantos años puede recuperar kilos demás si no se preocupa por hacer de la actividad física un hábito.
En LIMARP contamos con un equipo completo de profesionales que se encargan de guiar al paciente en cada etapa de su proceso, el cual incluye un plan de ejercicio apropiado y progresivo que le permitirá hacer propia esta indispensable herramienta.
Si crees que es momento de hacer un cambio en tu vida; si quieres recuperar la movilidad y volver a sentir la satisfacción de hacer ejercicio, no dudes en llamarnos. Para una valoración sin costo llama a LIMARP Centro de Excelencia Internacional en Obesidad marcando (664) 686 2542 o llena una forma de contacto en LIMARP
