La cirugía bariátrica es actualmente el tratamiento más efectivo contra la obesidad mórbida. Ayuda a los pacientes a perder peso y reduce significativamente los riesgos de salud relacionados con la hipertensión, la diabetes tipo 2, el dolor articular y la apnea del sueño. Con una cirugía bariátrica, un paciente puede perder hasta el 50% de su peso corporal después del primer año y medio de su cirugía, dependiendo del procedimiento quirúrgico. Sin embargo, la cirugía no logra esto por sí sola.
Para aprovechar al máximo sus beneficios, el paciente debe estar completamente comprometido con adoptar y mantener buenos hábitos de estilo de vida como seguir una dieta saludable, dormir 8 horas al día, evitar factores de estrés, eliminar prácticas nocivas como fumar y beber, y, especialmente, mantenerse físicamente activo.
El ejercicio después de la cirugía bariátrica es vital para la pérdida de peso y su mantenimiento a mediano y largo plazo. Los pacientes que se han sometido a una cirugía bariátrica pueden esperar un ligero aumento de peso al menos 2 años después de su intervención, una vez que el cuerpo alcanza su equilibrio y se acostumbra a su nueva dieta y actividades. Los pacientes que logran perder más del 25% de su peso corporal después de 4 o más años de su cirugía obtienen mayores beneficios para su salud y una mayor sensación de satisfacción con su tratamiento.
El ejercicio puede ser una importante terapia para los pacientes que tienen problemas en alcanzar sus objetivos de pérdida de peso. Por otra parte, algunas investigaciones han sugerido que los pacientes que pierden más del 25% de su peso pueden atribuirlo, precisamente, a una mayor actividad física y a su compromiso con una dieta baja en calorías.
En el Centro de Excelencia Internacional en Obesidad LIMARP ofrecemos planes personalizados de actividad física como parte de nuestros tratamientos para la obesidad. Consideramos tu actividad física y rutinas diarias, así como tu disposición corporal, para planificar secuencias de ejercicios que funcionen mejor para ti. Si estás interesado en saber más sobre nuestros servicios y tratamientos para la obesidad, llámanos. Con gusto te atenderemos.
Los efectos del ejercicio en la pérdida de peso.
Los efectos del ejercicio por sí mismo es limitado cuando se trata de la pérdida de peso. El Informe del Comité de Pautas de Actividad Física de los Estados Unidos establece que el ejercicio por sí solo generalmente resulta en una pérdida de menos del 3% del peso corporal inicial, en circunstancias normales y condiciones óptimas. Sin embargo, este resulta en una reducción más sustancial del peso corporal cuando es complementado con una dieta baja en calorías, incluyendo en personas que padecen obesidad.
Quemar 500 calorías al día logra la pérdida de más o menos 1 libra de peso por semana. Una persona necesitaría sostener 1 hora de ejercicio aeróbico al día para lograr perder una libra por semana. Las pautas de la Iniciativa de Educación para la Obesidad de NHLBI y el Equipo de Trabajo de Servicios Preventivos de los Estados Unidos señalan que 30 minutos diarios de ejercicio aeróbico, con un acumulado de 2,500 a 3,500 kcal por semana, promueven la pérdida de peso y la reducción de riesgos para la salud. Se ha informado que los pacientes con sobrepeso pueden perder desde el 2.5% hasta 8% de su peso corporal, con un periodo de 12 semanas o más de ejercicio por sí solo.
Más que tratar de convertirse en aficionados del ejercicio, las personas que luchan contra el sobrepeso y la obesidad deberían concentrarse en mantenerse físicamente activas. Una persona físicamente activa es alguien que hace ejercicio moderado durante al menos 30 minutos 3 días a la semana.
Esta ecuación mágica marca una gran diferencia, no solo en los resultados de la pérdida de peso, sino también en beneficios a largo plazo para el sistema metabólico, el funcionamiento físico en general y la calidad de vida.
La fuente de donde proviene la pérdida de peso es muy importante. Los pacientes pueden perder masa corporal magra como los músculos, la masa ósea y masa de órganos internos después de su cirugía bariátrica. Esto no es ideal, ya que podría afectar la densidad ósea y la función física general.
El ejercicio y la actividad física contribuyen a quemar grasa y mantener la masa muscular magra. El ejercicio de resistencia te permite mantener tu masa muscular magra y quemar más grasa, mientras que el ejercicio aeróbico te ayuda a quemar calorías y mejorar tu condición cardiovascular.
Los beneficios del ejercicio más allá de la pérdida de peso.
El ejercicio hace mucho más por tu cuerpo que simplemente deshacerse del peso extra. Los pacientes de cirugía bariátrica pueden beneficiarse enormemente del ejercicio regular y constante.
El ejercicio aeróbico moderado mejora la sensibilidad a la insulina y la tolerancia a la glucosa después de la cirugía bariátrica, lo que ayuda a los pacientes con diabetes tipo 2, SOP y síndrome metabólico. El ejercicio tiene un poderoso efecto en la salud metabólica, ya que influye en múltiples sistemas de órganos, como los músculos, el hígado y el páncreas. También beneficia la habilidad cardiorrespiratoria, que a su vez reduce la mortalidad por enfermedades cardiovasculares.
El ejercicio no solo proporciona beneficios físicos. También mejora la salud mental. La actividad física ayuda a mantener el cuerpo y la mente energizados. El ejercicio contribuye a reducir la depresión y la ansiedad. La actividad física también ayuda a pensar más claramente. El movimiento, la coordinación y la estimulación física conducen a un aumento en la concentración e incluso el rendimiento académico.
El ejercicio después de la cirugía bariátrica: Un desafío
Es bien sabido que el ejercicio proporciona grandes beneficios para la salud. Pero esto no significa que hacer ejercicio sea fácil. Existen barreras que pueden dificultar la práctica rutinaria de ejercicio. Por ejemplo, la falta de motivación, orientación, equipo y, especialmente en personas con obesidad, una movilidad limitada y problemas de salud.
Estudios han demostrado que el ejercicio después de una cirugía bariátrica representa un reto para muchos pacientes. La mayoría de los pacientes que se han sometido a cirugía bariátrica acumulan menos de 150 minutos de ejercicio por semana, lo que podría limitarlos de obtener todos los beneficios posibles de su tratamiento quirúrgico.
Un estudio longitudinal de 2012 mostró que entre el 23 % y el 29% de 310 pacientes eran 5% menos activos 1 año después de su cirugía, en comparación con el nivel actividad que tenían antes de la cirugía.
Otros pacientes pueden desmotivarse cuando realizan rutinas de ejercicio muy intenso, solo para descubrir que obtuvieron poca o ninguna pérdida de peso adicional semanas después.
Se ha comprobado que las personas que han recibido cirugía bariátrica tienden a quemar menos calorías con ejercicios de media y alta intensidad en comparación con personas que no han tenido ninguna cirugía.
Sin embargo, cuando se trata de hacer ejercicio después de una cirugía bariátrica, se debe considerar que el propósito es evitar recuperar las libras perdidas, más que buscar una pérdida de peso adicional. Incluso con la limitación que acabamos de mencionar, el ejercicio después de la cirugía bariátrica está correlacionado con una mayor pérdida de peso postoperatoria.
Los pacientes que practican ejercicio después de la cirugía bariátrica muestran una pérdida de peso 4.2% superior, en comparación con los pacientes que no hicieron ejercicio, a los 12 meses después de la cirugía, y aún más 24 meses después.
Para obtener mejores resultados, los pacientes que han recibido cirugía bariátrica deben enfocarse en hacer ejercicio moderado de manera constante y frecuente, en lugar de preferir sesiones muy intensas y más separadas entre sí.
Ejercicio antes de la cirugía bariátrica
La mejor forma de preparar al cuerpo y la mente para un nuevo estilo de vida saludable es comenzar a hacer ejercicio desde meses antes de la cirugía. Comenzar a ejercitarse 1 año o 6 meses antes de la cirugía es una buena estrategia para mejorar tu condición cardiovascular, activar tu cuerpo, ganar condición y acostumbrarte a dedicar un momento del día para la salud física.
Bailar, caminar, hacer yoga y nadar son excelentes opciones. Caminar es uno de los ejercicios más fáciles y prácticos para quemar calorías. Caminar de 30 minutos a 1 hora, ya sea diariamente o 3 días por semana, logra maravillas en el cuerpo. La mayoría de los programas de ejercicios de cirugía bariátrica en realidad comienzan con sesiones de caminata y luego progresan a actividades más diversas e intensas.
Ejercicio después de la cirugía bariátrica
El ejercicio después de la cirugía bariátrica debe comenzar gradualmente después de la segunda o cuarta semana, dependiendo del tipo de cirugía y si es que hubo alguna complicación. Hacer caminatas cortas todos los días es un gran comienzo. Es necesario aumentar el ritmo y la distancia de la caminata poco a poco hasta lograr una meta de 10,000 pasos diarios. Esto equivale a 8 kilómetros o una caminata de 1 hora.
Durante los primeros 6 meses, sesiones de 30 minutos, 3 días a la semana serán suficientes para mantenerte activo y alcanzar tus objetivos de pérdida de peso. Después de un año de la cirugía, y ya como hábito a largo plazo, deberás realizar sesiones de ejercicios más intensos y diversos de 45 minutos o 1 hora, 3 días a la semana. Ciclismo, trotar y entrenamiento de levantamiento de pesas ligeras y resistencia son buenas opciones.
En LIMARP, nuestros tratamientos para la obesidad incluyen un plan de actividad física personalizado. Nuestro equipo de nutrición y acondicionamiento físico te guiará a través de diferentes actividades que podrás realizar para obtener el máximo provecho de tu procedimiento quirúrgico. También recibirás orientación con planes de nutrición personalizados.
Una dieta baja en calorías es fundamental para obtener los mejores resultados posibles de tus rutinas de ejercicio y, por supuesto, de tu cirugía bariátrica a largo plazo.
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